En el año 2015 se cumplen ya 18
años de implantación del modelo de dirección/gestión por objetivos en la
Dirección General del Catastro español. Sin duda, la integración de una
metodología que compromete directamente a los gestores públicos con los resultados
obtenidos constituye una de las características diferenciadoras del modelo
catastral español, y es una de las causas de los excelentes resultados alcanzados
y de la alta calidad de la información gestionada en las bases de datos
catastrales. Muy pocos servicios públicos pueden presentar un
balance tan positivo, tanto en la implantación y aplicación del modelo como en resultados obtenidos, lo cual es doblemente valioso si se tienen en
cuenta las políticas de reducción de personal que tan duramente están afectando
a todos los órganos de las Administraciones públicas españolas.
La Dirección General del Catastro
acaba de publicar un documento descriptivo básico del Plan de Objetivos para el
presente año. A pesar de su carácter genérico, incluye pinceladas que describen
bien por dónde se centran los esfuerzos del centro directivo, orientados en tres líneas básicas:
-La mejora de la calidad de la
información descriptiva de los inmuebles y de los valores catastrales
aplicados.
-La mejora general en la calidad
del servicio prestado a los ciudadanos,
-y la integración del modelo de
gestión por objetivos en el sistema general definido por la Inspección delos
Servicios del Ministerio de Hacienda y Administraciones públicas.
Como se detalla en la siguiente
imagen, incluida en el documento publicado, el Plan de Objetivos sigue las
directrices definidas en el Plan Estratégico aprobado, con lo que se garantiza
la coherencia entre estrategias y operaciones.
El Plan de Objetivos 2015 incluye
todos los grandes retos en los que está actualmente comprometida la Dirección
General del Catastro: Procedimiento de regularización catastral, aplicación de
coeficientes de actualización de los valores, -al alza o a la baja-, como consecuencia de lo dispuesto en la Ley
de Presupuestos, definición del “valor de referencia”, etc., algunos de los
cuales han sido comentados en otros lugares de este blog.
En la siguiente tabla, de
elaboración propia sobre la información contenida en el documento publicado, se
resumen las ideas principales, centradas en los tres grandes grupos de
objetivos, contando cada grupo con su propio peso específico dentro del Plan, o en su caso, influyendo positiva o
negativamente sobre los resultados obtenidos en otros objetivos.
Una reflexión para concluir: el
documento publicado define ideas generales, pero no describe con detalle los
objetivos instrumentales ni mucho menos los objetivos concretos que se fijan
para cada gerencia. Esto ha sido siempre así, y responde a la prevención del
gestor a ser “controlado” por terceros, a través del seguimiento detallado de
los objetivos. Cabe ahora cuestionarse, en el marco y el espíritu de la Ley de
Transparencia, si esta reserva se encuentra plenamente justificada y si el
Catastro debería, como ha hecho siempre, liderar un cambio de actitud, favoreciendo el acceso a toda la información que forma su Plan
de Objetivos. No olvidemos que en la Exposición de Motivos de la Ley de
Transparencia se señala expresamente que: “Sólo
cuando la acción de los responsables públicos se somete a escrutinio, cuando
los ciudadanos pueden conocer cómo se toman las decisiones que les afectan,
cómo se manejan los fondos públicos o bajo qué criterios actúan nuestras
instituciones podremos hablar del inicio de un proceso en el que los poderes
públicos comienzan a responder a una sociedad que es crítica, exigente y que
demanda participación de los poderes públicos”.
Puedes encontrar el documento
publicado en:
y un trabajo sobre la
implantación del sistema de dirección por objetivos en el Catastro español en:
Amigo Ignacio:
ResponderEliminarComo siempre has dado en el clavo, señalando la clave del asunto, la necesidad de transparencia. Estoy totalmente de acuerdo contigo