Por fin el Ministerio de Hacienda
y Administraciones Públicas de España ha dado información sobre los resultados globales
derivados del Plan de Regularización Catastral, que viene desarrollándose desde
2013 y que tiene por objeto descubrir y
actualizar todas aquellas situaciones en las que los inmuebles no se
encontraban adecuadamente descritos en las bases de datos catastrales.
6.331 Ayuntamientos han logrado
gracias a este Plan mejorar notablemente sus ingresos por el Impuesto sobre
Bienes Inmuebles, también conocido por sus siglas: IBI (equivalente al impuesto
predial en muchos países latinoamericanos), puesto que ha permitido descubrir construcciones
irregulares que los ciudadanos no habían declarado y por las que deberían pagar
los correspondientes impuestos.
Hasta la fecha se han podido
regularizar, gracias a la utilización de imágenes obtenidas con satélites y
otras fotos aéreas y del trabajo de campo posterior que se ha realizado casi
1,7 millones de edificaciones. La mayor parte de las construcciones irregulares
son nuevas construcciones, ampliaciones de viviendas, cerramientos de terrazas, techados de áticos,
construcciones suplementarias a la vivienda principal, metros ganados al jardín
o al chal, y piscinas que no estaban declaradas.
Fuente: ponencia presentada por Fernando de Aragón, Subdirector
General de Valoración de la Dirección General del Catastro de España, en el
VIII Simposio Iberoamericano de Catastro, celebrado por el Comité Permanente del
Catastro en Iberoamérica (CPCI) el
pasado año, en Brasilia.
Como consecuencia, y según datos
oficiales del Ministerio de Hacienda, el registro de inmuebles de cada
municipio se ha incrementado un 3% de media tras finalizar el proceso, lo que
ha permitido a los Ayuntamientos recaudar 1.254 millones de euros más por el
IBI (1,378 millones US$). Además los Ayuntamientos pueden proceder a liquidar
los ingresos no declarados en los últimos cuatro años, con lo que los ingresos
totales derivados de este proceso serán finalmente mucho mayores.
Una de las singularidades, y a mi
juicio mayores éxitos de este Plan, es que este proceso se autofinancia, ya que
los propietarios de los inmuebles regularizados deben pagar una tasa de 60
euros por cada inmueble regularizado. Haciendo una multiplicación simple, el
pago de la tasa correspondiente a los 1,7 millones habría supuesto para el Ministerio
de Hacienda español 102 millones de
euros de ingresos (112 millones US$), con los que se pagaron los trabajos de
captura de datos en campo realizados por las empresas colaboradoras que han
trabajado en el Plan de Regularización. Por tanto, no fue necesario localizar
recursos extraordinarios ni depender de fuentes externas de financiación para
cubrir los gastos derivados del Plan. Son los propietarios de los inmuebles que
se regularizan los que los pagan.
En entradas anteriores del blog
ya se trató este tema (puede verse la del martes 6 de agosto de 2013, titulada “El nuevo procedimiento de regularización
catastral, la calidad del dato y la eficiencia en el gasto público”) aunque
no ha sido hasta ahora cuando se han publicado datos precisos de sus
resultados.
Lo que si indicamos en esas
entradas anteriores es algo que ahora destaca también la información publicada,
que demuestra que este impuesto es el más importante para las entidades locales
españolas. El último dato disponible muestra que la recaudación por este
tributo, que se ha duplicado en la última década, supuso ya casi el 40% de los
ingresos impositivos de las 8.200 entidades locales españolas. Y se añade una
información muy relevante, y que debería ser tenida en consideración en todos
aquellos países que enfrentan situaciones de reducción de su actividad
económica y por tanto también de sus ingresos tributarios: el IBI ha sido el
único tributo del sistema fiscal español cuya recaudación ha crecido de forma
constante durante todos los años, incluso durante los peores momentos de la reciente
crisis. Ello se debe a su carácter anticíclico, lo que le convierte en un arma
financiera imprescindible para reforzar y estabilizar los sistemas de ingresos de
las administraciones municipales.
Y un último dato significativo:
en España se han acogido a este Plan de Regularización catastral municipios gobernados
por partidos políticos de todas las ideologías existentes, lo cual demuestra su
valor instrumental como herramienta para luchar contra el fraude fiscal.
Puedes ver la información
ampliada en:
No hay comentarios:
Publicar un comentario